9 razones por las que el proyecto de tu coche se paga solo

¿Intentas convencer a tu mujer de que te deje comprar un Miata? ¿La frase "construido, no comprado" te parece una quimera? Permíteme que te ayude. Comprar un coche de proyecto fue una de las mejores decisiones financieras que he tomado.

Hace unos años, un amigo mío vendía su Mazda Miata de 1994. En aquel momento tenía un WRX nuevo, pero estaba encaprichado con la idea de un biplaza pequeño y asequible con tracción trasera.

Este ejemplar estaba en un estado aceptable, pero lejos de ser perfecto: la luz de advertencia del airbag parpadeaba, la puerta y la aleta derecha estaban abolladas, la capota estaba rasgada en la ventanilla trasera, el selector de ventilación del aire acondicionado no funcionaba y el embrague se estaba muriendo.

A estas alturas de mi vida, había cambiado el aceite y rotado los neumáticos, pero nada más. Sabía que este coche tenía potencial y que, siempre que hiciera el trabajo yo mismo, podría ser barato.

Así que lo compré. En los dos últimos años he aprendido tanto de este coche como de la universidad, he conocido a mucha gente estupenda y he tenido grandes historias que contar.

9 formas en que tu proyecto de coche se amortizará

#1 - Conoce tu coche por dentro y por fuera

He tocado casi todos los componentes del compartimento del motor, aparte de reconstruir el propio motor (aunque pienso hacerlo algún día). He sustituido todos los fluidos y cambiado todas las juntas externas y conozco el kilometraje de todos los componentes reparables.

Si surge un problema, tengo una ventaja sobre dónde buscar, ya que estuve allí hace poco tiempo y recuerdo cómo está montado.

#2 - Aprender a ser autosuficiente

Es muy fácil llevar tu coche al concesionario, entregar un cheque en blanco y hacer que el problema desaparezca... pero no se aprende nada haciendo que otro haga el trabajo.

Hacer el trabajo tú mismo te da una sensación de orgullo y logro sin igual, con la confianza de que puedes resolver cualquier problema que se te presente.

Además, puede que descubras que las cosas que aprendes en el garaje se trasladan a otros aspectos de tu vida, como el mantenimiento del hogar o el montaje de muebles. ¡Apuesto a que después de cambiar el embrague podrás montar una bonita cómoda en poco tiempo!

#3 - Aprenderás excelentes habilidades para resolver problemas

¿Qué es este ruido? ¿Por qué mi velocidad de ralentí es irregular? Aprenderás a identificar las causas de estos molestos problemas, profundizando en el manual de fábrica para aprender cómo funciona cada sistema, y siguiendo con algunas pruebas de diagnóstico para determinar qué piezas funcionan como es debido y cuáles hay que sustituir.

Hay pocas sensaciones mejores que el momento "¡AHA!" cuando resuelves un problema que has estado persiguiendo durante horas, días o incluso meses. Cuanto más tiempo hayas perseguido el problema, mayor será la satisfacción, aunque se trate de un simple error.

Estas habilidades de resolución de problemas también pueden transferirse a otros aspectos de tu vida y pueden ser un gran incentivo para tu carrera: todo el mundo quiere contratar a la persona que puede arreglar cualquier cosa.

#4 - Entender cómo interactúan los diferentes sistemas del vehículo

¿Cuál es la relación entre el tiempo de encendido y el ralentí? ¿Cómo funciona mi coche sin el sensor de masa de aire conectado?

Estas son las preguntas que podrás responder con seguridad, porque has pasado tiempo bajo el capó estudiándolas, reparándolas, poniéndolas a punto y rezando para que funcionen como es debido.

#5 - Superar tus miedos

Hay muchos trabajos en un coche que me dan miedo. Trabajar en los coches puede ser peligroso, pero si tomas las precauciones necesarias y utilizas un poco de sentido común, no hay nada que temer.

Cuando empecé a preocuparme por romper algo caro, recordé que cada vez que contratas a alguien, puedes hacerlo tú mismo tres veces por el mismo precio.

#6 - ¡Ahorrarás dinero!

Aprender los fundamentos del funcionamiento de un coche es mucho más barato en un coche de proyecto de 500 dólares que en un coche deportivo de 50.000 dólares. Las piezas de recambio suelen ser más fáciles de encontrar y hay una gran cantidad de conocimientos en Internet, ya que los coches viejos baratos suelen ser producidos en masa y ampliamente conocidos.

Mucha gente oye las palabras "coche de proyecto" y piensa que significan "pozo de dinero". La línea entre ambos suele ser muy difusa, pero creo que depende mucho de la actitud. Si abordas tu proyecto con la mentalidad de "¡voy a volver a poner en marcha este coche!", probablemente puedas proceder sin problemas.

A veces se necesita un poco más de dinero del esperado para resolver un problema, pero sales de la experiencia con un conocimiento y una sabiduría difíciles de calibrar y que te ayudarán en tu próxima aventura de formas que no podías prever. Cuando finalmente consigas ahorrar para comprar el coche de tus sueños, sabrás moverte por el vano motor.

#7 - Conocerás a gente estupenda

A los entusiastas de los coches les encanta ayudarse mutuamente. Cuando alguien publica una pregunta seria en un foro, muchos ofrecen consejos y algunos incluso se ofrecen a ayudarte a hacer el trabajo a cambio de un paquete de cerveza.

Son personas que aman los coches y que celebrarán contigo tus victorias personales. Se asegurarán de que estés preparado para el próximo autocross o rally automovilístico.

#8 - Construye el carácter

Trabajar en los coches es sólo eso: trabajo. Puede ser muy divertido, pero mentiría si dijera que siempre es fácil cuando me meto en el garaje (en realidad, la mayoría de las veces no es nada fácil).

A veces no hay espacio para alcanzar un tornillo, a veces hace falta mucho músculo para quitar una pieza vieja, y a veces parece que los ingenieros que construyeron el coche no esperaban que lo desmontaran.

Volver a hacer el mismo trabajo porque te has equivocado te enseña paciencia, perseverancia y quizás incluso humildad. Aprecio estos rasgos, pero adquirirlos no suele ser divertido.

#9 - Dan lugar a grandes historias

Si todo fuera como la seda, la vida sería aburrida, ¿verdad? A veces los trabajos no salen como se han planeado.

Tuve que rehacer la correa de distribución cuatro veces porque el engranaje de la leva de admisión se había salido del perno. Las marcas de distribución estaban perfectamente alineadas, pero la admisión estaba demasiado adelantada, lo que provocaba un ralentí muy brusco. Tras sustituir la mitad de los componentes del compartimento del motor, me di cuenta de mi error.